Como él mismo dice, “Doña Lolita es una de esas maestras que no camina de puntillas. Tenía el don de enseñar y sentirse amado por sus alumnos. En conclusión, enfatiza, “Sepa que ha sembrado semillas en miles de estudiantes que han surgido con el tiempo, con conocimiento o no, pero que nos han hecho a todos mejores personas. Gracias por educarnos y por criar a tantos estudiantes. Es lo que siento y no quiero guardarlo dentro. "
Manolo Verdejo de la Asociación de Antiguos Alumnos coincide con este testimonio, mientras que Maribel Jiménez cree estar “muy feliz” de tenerla como maestra, a la que recuerda “con mucho cariño como mujer, maestra y como persona”. .
"Nos condujo sin castigo"
Y Juanma Pastor, que también fue alumno de Lolita Bartolomé en el Colegio García Valiño, añade que se trata de un homenaje “merecido”: “Ha marcado positivamente el camino que hemos tenido que recorrer desde pequeños, él también tiene nuestro infancia de manera positivamente valorada. No podíamos defraudarla porque era una mujer tan buena y tenía tanta psicología como profesora. Nos ayudó en todo y cuando alguien se rebelaba nos guiaba sin necesidad de castigo. Es una gran mujer y ex maestra con infinita paciencia. "
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