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«Había estudiado zorros y ginetas, pero nunca había visto nada parecido: un oso que mata a mis animales». José Prieto todavía dice estar «en estado de shock». Cuando llegó a su zoológico el sábado por la mañana, parte de su complejo de casas rurales en Quirós, Asturias, Casas Prieto, “ya había encontrado una de mis cabras muertas en la calle. Por dentro todo era peor ». Hasta nueve animales que componen su finca original (consistente en cabras enanas, cabras de angora, alpacas, ponis) fueron «destruidos».
Tanto él como los miembros de la guardería rural que se presentaron en la instalación turística descartaron «que sea un lobo o un animal más pequeño». Las huellas, dice, «son de un oso grande y otros dos más pequeños». Todo indica, explica, «que fue una osa con sus cachorros» quien entró en su patio.
Y lo hizo trepando a un árbol. «Cerré muy bien la finca, sabíamos que los osos ya estaban aquí porque teníamos huellas, pero nunca entraron».
Logró entrar por un árbol, «y luego, sí, entró por la cerca, que parece rota por dentro».
José Prieto aún no ha calculado los daños “porque son especies raras y difíciles de encontrar. Una cabra de angora puede superar los mil euros. Los atacantes mataron dos cabras de angora, una cabra mixta (angora y enana), una oveja y sus dos crías, y tres cabras enanas, «todas ellas preñadas».
El propietario del conjunto rural Casas Prieto está muy preocupado porque “tras el atentado del viernes por la noche, ayer sábado, regresaron. Enterraron una oveja para comer y vinieron a buscarla «.
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