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Un hombre de 27 años ha fallecido en la localidad de Valdepeñas (Ciudad Real) tras sufrir una severa intoxicación con anhídrido carbónico, el conocido como ‘tufo del vino’, en su puesto de trabajo en una bodega de la localidad. Según han trasladado fuentes del Servicio de Emergencias del 112 de Castilla-La Mancha consultadas por Europa Press, el aviso fue realizado sobre las 22.53 horas de este martes, tras quedar inconsciente la víctima por inhalación del gas.
El ‘tufo del vino’ es como conoce en la industria al gas que se produce de forma natural durante el proceso de la fermentación alcohólica en el cual los azúcares de la uva, en presencia de levaduras, se transforman en alcohol etílico (etanol), generando grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2 o anhídrido carbónico). Es muy necesario en enología, porque ayuda a controlar los niveles de oxígeno, protege el líquido y es responsable, en buena medida, de la maceración carbónica del caldo. Pero es muy peligroso.
La principal amenaza es que es un gas inodoro, incoloro y prácticamente imperceptible que puede resultar mortal liberado en grandes cantidades. Produce una rápida pérdida de la consciencia y puede provocar la muerte por ahogamiento en tan solo unos minutos, ya que el olor no se aprecia en el aire.
«Profundo dolor»
En la bodega de Valdepeñas, a pesar de la asistencia de una UVI móvil, que trató de reanimar al joven trabajador tras inhalar el ‘tufo del vino’, el joven empleado falleció. El accidente ha provocado la reacción del sindicato CCOO en Ciudad Real. El sindicato ha mostrado su «profundo dolor, y también su indignación y su rabia», por la muerte en accidente laboral del trabajador.
El sindicato pide el «máximo rigor» tanto en la determinación de las causas del siniestro como, en su caso, en la exigencia de responsabilidades. CCOO ha avanzado que presentará la correspondiente denuncia ante la Inspección de Trabajo, y seguirá «con la máxima atención» sus actuaciones investigadoras y sus resoluciones.
«No entendemos cómo, a estas alturas, siguen sucediendo estos accidentes, cuando los protocolos para el trabajo en bodega llevan años normalizados, y por el propio conocimiento de las empresas vitivinícolas de los riesgos que conlleva exposición a agentes químicos asfixiantes», señalan en un comunicado. El tradicionalmente conocido como ‘el tufo del vino’, denuncia este sindicato, «se ha cobrado a lo largo de la historia muchísimas vidas en las bodegas».
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