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Personal especializado, dotado con equipo de protección personal por precaución, traslada un féretro a Covid. /
La comunidad suma otras 44 muertes, entre ellas una niña de 29 años, y la cifra de fallecidos llega a 308 en poco más de un mes
La gripe Covid impuesta a mediados de marzo se está cobrando un precio muy alto, pese a la oposición de gran parte de los profesionales sanitarios. Entre julio y los primeros días de agosto, la comunidad contabiliza ya 308 muertos por el coronavirus, una cifra que supera los registros de veranos anteriores. En el mismo período (entre el 1 de julio y el 5 de agosto) de 2020, la región apenas sumó seis muertos, mientras que el año pasado registró 73, por lo que las cifras actuales cuadruplican los registros del verano de 2021 y elevan la mortalidad registrada por esta reciente embestida. del virus está dejando atrás, en niveles preocupantes.
- 308
Las muertes por coronavirus se registraron en julio y agosto, en comparación con 6 en el mismo período en 2020 y 73 en 2021.
- 9,846
Las muertes por el virus se han ido acumulando en la comunidad desde que comenzó la pandemia.
El punto de partida de estos tres veranos es diferente, lo que es un factor clave en la existencia de registros tan diferentes. En 2020, la comunidad y el resto de España se acercan al verano después de mucho tiempo
toque de queda con lo que los contagios se redujeron prácticamente y con una desescalada que permitió ir relajando progresivamente las restricciones, aunque manteniendo ciertas restricciones en espacios cerrados y precauciones como el uso de la mascarilla. La mayoría de la población respetó en gran medida los consejos de los expertos y la administración, como reducir los contactos sociales y proteger a los ancianos y vulnerables.
Un año después, la comunidad acababa de sufrir la cruel y mortal tercera ola, dejando los niveles de contagio acotados entre marzo y junio. Además, la población anciana y vulnerable ya contaba con las vacunas y aún se requería el requisito de mascarillas, por lo que el repunte de infectados durante el verano aumentó levemente el número de muertos, aunque ni siquiera se acercó a los datos actuales. Apenas hay restricciones en este horario de verano, los contagiados llevan sin aislamiento ni aislamiento desde finales de marzo
cuarentenas y con las limitaciones actuales en la realización de pruebas diagnósticas, hay una gran cantidad de casos ocultos; a esto se suma la pérdida de eficacia de las vacunas y la administración poco acertada de la dosis de refuerzo, un cóctel que conduce al aumento de las muertes.
El aumento de la mortalidad se produce tras el fin del aislamiento de positivos y restricciones
De hecho, este viernes el Ministerio de Sanidad ha informado de 44 muertes más por coronavirus, todas con fecha de fallecimiento en los últimos 7 días excepto tres, el 11, 13 y 19 de julio. Hay 22 mujeres entre 29 y 103 años y 22 hombres entre 58 y 93 años. El fallecido de 29 años tenía otras enfermedades graves.
Sin embargo, la actualización de datos sigue reflejando la disminución del número de contagios registrados oficialmente y la disminución de la presión hospitalaria. En concreto, Sanidad ha notificado
2.495 nuevos positivos (mil menos que el viernes pasado), de los que 1.264 eran mayores de 60 años (unos 500 menos), lo que hace que la incidencia acumulada siga descendiendo tanto a los 7 como a los 14 días, con tasas de 172 y 439 casos por 100.000 Residentes.
Por su parte, los centros hospitalarios de la Comunidad tienen ingresadas 871 personas, 122 menos que el martes. De ellos, 52 están en unidades de cuidados intensivos (UCI), dos menos que el martes.
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