C. Valenciana

La vacunación frena en la plantilla de las residencias valencianas y amenaza con más restricciones

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Vacunación del segundo refuerzo de la vacuna covid en una residencia de ancianos. / irene marilla

Los centros están notando un aumento en los trabajadores que rechazan la dosis de refuerzo a medida que la comunidad supera nuevamente los 2,000 casos.

Las residencias de ancianos de la comunidad, o al menos parte de ellas, están notando un aumento en el número de trabajadores sociales que se niegan a recibir el segundo refuerzo de la vacuna Covid; una tendencia que empieza a preocupar a los responsables de estos centros asistenciales. El sector teme que esta reducción de los índices de vacunación de su plantilla provoque una ampliación o incluso un aumento de las limitaciones de estos recursos, especialmente a la hora de visitar a las familias de los usuarios.

Una gran parte de estos profesionales se han infectado en algún momento y se han recuperado de la enfermedad -incluso más de una vez-, la gran mayoría ha recibido la primera dosis de refuerzo y en algunos casos ha padecido las molestias o efectos secundarios de los problemas antivirales que contribuyeron a esta denegación de la segunda vacuna de refuerzo de la campaña lanzada por el Ministerio de Sanidad en las residencias de mayores a finales de septiembre.

En este sentido, desde la Asociación Empresarial de Hogares y Servicios para la Comunidad del Dependiente (Aerte), recuerdan que el protocolo vigente establece que los centros que se consideran con “vacunación completa” son aquellos en los que el 95% de los trabajadores están en régimen completo – primeras dos dosis- y que el 90% de ellos han recibido el refuerzo. Por debajo de estos porcentajes se consideran centros con “vacunación incompleta”, y “esto afecta al traslado de personas que quieren ir a otro centro, a los viajes y visitas -no las cancela, pero las condiciona- e incluso a la caducidad de los afiliados”. centros de día», explican desde la patronal. Además, también puede llevar a la necesidad de multiplicar las pruebas de detección realizadas por profesionales y adoptar otras medidas restrictivas.

“Afortunadamente los usuarios están todos vacunados, pero el problema es que los casos vuelven a aumentar y las medidas se vuelven a cronificar”, advierten, sobre todo de cara al invierno, cuando los contagios tienden a aumentar.

La patronal exige la supresión de las medidas salvo la obligatoriedad de mascarilla para la plantilla, los planes de emergencia y el stock de material

Actualmente, las residencias de ancianos están obligadas a ofrecer habitaciones ventiladas que respeten la privacidad de los visitantes, por lo que no se pueden utilizar todas las áreas, desinfectándolas antes y después de todos, mientras que tienen acceso limitado a las habitaciones excepto en ciertos casos, lo que «genera sospechas entre los familiares». » «Si las plazas están ocupadas, tienen que esperar, se recomienda llamar antes, es como una cita previa oculta porque no tienes gente esperando fuera de la puerta. Las residencias solían ser un lugar absolutamente abierto. Cuando es fuera no hay medidas, ¿de qué sirve tenerlas dentro?”, se preguntan. “Pensamos que tanto el Departamento de Sanidad como el Departamento de Política de Igualdad e Inclusión siguen imponiendo restricciones injustas y desproporcionadas. Exigimos que todo menos las mascarillas para los trabajadores, el plan de contingencia -en caso de brote- eliminado y un suministro adecuado de medicamentos se mantiene el suministro eléctrico», enfatiza von Aerte.

En este sentido, el ministro de Sanidad, Miguel Mínguez, indicó la semana pasada que este aumento del rechazo a la vacuna al inicio de la campaña podría ser «lógico» ya que los profesionales saben que más adelante en la campaña conjunta podrían inmunizarse de la Covid gripe. «La vacunación dual aumentará la adherencia», predijo. Desde el departamento han evitado ofrecer datos detallados por el momento.

Desde el Consejo Comunitario de Enfermería (Cecova), ya han indicado que la administración del segundo refuerzo “se ha ralentizado en general, y también en los aseos”.

Ante eso, la pandemia sigue muy presente en la comunidad. Sanidad reportó este viernes otros 2.195 contagios, 290 hospitalizados (16 de ellos en cuidados intensivos) y 11 fallecidos (cinco mujeres de entre 63 y 94 años y seis hombres de entre 81 y 91 años). La incidencia acumulada a los 14 días aumenta a 192 casos ya los 7 días se mantiene en 92 casos.


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