La Cámara de Cuentas de Andalucía aprueba las directrices de control de contratos para la gestión sanitaria del Covid

La Cámara de Cuentas de Andalucía ha aprobado las directrices para el control del cumplimiento de los contratos de gestión sanitaria de la Administración Autonómica durante la crisis de la pandemia del Covid. Estas directrices técnicas están recogidas en el documento aprobado en el pleno de este órgano parlamentario y corresponden al control de estos contratos sanitarios en 2020.

La Cámara de Cuentas considera que esta medida es de “legalidad y seguridad razonable” con el objeto de obtener prueba “razonable, suficiente y pertinente” de la existencia o inexistencia de “inexactitudes sustanciales e incumplimientos significativos del marco normativo” que sirva de base para la elaboración de una Evaluación global del cumplimiento de las normas aplicables al asunto objeto de examen».

Los objetivos generales que persigue esta auditoría son comprobar que las entidades que integran la administración de la Junta de Andalucía cumplen con la obligación de transmitir a la Cámara de Cuentas la información establecida por resolución de la Mesa de la Entidad Fiscalizadora.

Además, pretende comprobar que los procedimientos puestos en marcha por la Dirección General de Contratos, que corresponde al Ministerio de Hacienda y Financiación Europea, permiten conocer todos los contratos que se están tramitando en la vía de emergencia por parte de las Comunidades Autónomas. Administración y sus organismos adscritos a la crisis sanitaria provocada por la pandemia.

Además, busca verificar que los contratos tramitados por la Vía de Emergencia, que son objeto de control, cumplan con la derogación establecida por la ley, así como verificar que se ajusten a los supuestos que generalmente justifican la tramitación de emergencia, como así como las establecidas para su ejercicio, condiciones y límites.

Finalmente, el ámbito objetivo y temporal de la auditoría incluye todos los contratos de emergencia celebrados en 2020 como consecuencia de la gestión de la situación de crisis sanitaria en el marco de la Junta de Andalucía y sus organismos adscritos, “sin perjuicio de que estos hechos o actuaciones sean posteriores al mencionado ejercicio analizado en la medida que se considere necesario para el mejor cumplimiento posible de los objetivos previstos”, según la Cámara de Cuentas.