Hospital de Niña Muerta Valencia | Los padres de una niña de 12 años informan de su muerte por peritonitis tras tres visitas a urgencias

Emma tenía 12 años, jugaba al fútbol y cursaba segundo de ESO en Jérica, Castellón hasta que empezó a sentirse mal los últimos días de enero. Una semana de dolor abdominal, vómitos, fiebre y hasta diarrea. Nada de esto la ayudó a hacerse un análisis de sangre o una ecografía cuando sus padres la llevaron tres veces al servicio de salud.
“Por eso murió”, decidieron sus padres, Ramón Martínez y Beatriz Gascón. La niña falleció en la madrugada de este lunes 6 de febrero en el Hospital Clínico de Valencia a causa de una peritonitis purulenta, es decir una apendicitis que se ha complicado por no ser detenida a tiempo.

«Nuestra hija murió porque en ocho días a ningún médico se le ocurrió hacer un análisis o una ecografía, cosas que tardan dos minutos; A pesar de
Los síntomas empeoraban cada día, Hemos estado hasta tres veces en centros de salud y hospitales”, dijo el padre, quien agregó que la vida “sin ella” sería muy difícil.

«Ahora tenemos que enfrentarlo
Un mundo sin Emma y en una casa donde su cuarto lleva su nombre y sobre su escritorio está su tarea a medio terminar”, agregó Ramón Martínez. Tanto él como su mujer, ambos de 48 años, quieren que esto no vuelva a ocurrir: «Vamos a luchar para que a partir de ahora haya algún tipo de protocolo que evite que una niña de 12 años muera de una apendicitis complicada porque Bei A sangre o no se realiza una ecografía en ninguna visita al médico.

una semana de sufrimiento

Emma murió ocho días después de que empezó a sentirse mal. Los hechos comenzaron el domingo 29 de enero, cuando los padres llevaron a la pequeña al Centro de Salud Viver, a pocos kilómetros de Jérica. Un médico la atendió y atribuyó el estado de la niña a un virus oa su primera menstruación, informan los padres. Pese a ello, los padres ya advirtieron que podría tratarse de una apendicitis, pues había varios antecedentes familiares, incluido otro hijo mayor.

Pero los sanitarios no dieron sentido a este precedente, del que los padres habían advertido. La joven se puso cada vez peor
Cada día sentía más dolor, «y se debilitaba y enfermaba más», le dijo su padre. El jueves 2 de febrero, la preocupación de los padres por el estado de Emma les llevó a volver al médico de Viver, donde fueron atendidos por otro médico de guardia: «El diagnóstico era similar: un virus o los síntomas de la regla y casa».

Pasaron varios días y la situación empeoró. Las cosas se complicaron tanto que la “niña apenas podía caminar el viernes”, por lo que los padres decidieron seguir adelante el sábado 4 de febrero.
Urgencias del hospital de referencia de Sagunto, a 42 kilómetros de donde vive. “Estuvimos prácticamente todo el día allí y no se hizo ni un análisis ni una ecografía. Solo se necesitan dos minutos en una sala de emergencias para hacer una ecografía o una extracción de sangre y no lo hicieron, por lo que no está viva. Estuvimos allí hasta las 17:00 horas y después de unos análisis de orina y una auscultación de los intestinos, la enviaron a su casa.

Pero el sufrimiento y las dolencias de Emma empeoraron. La situación de la pequeña se volvió tan complicada que el domingo 5 de febrero “perdió el conocimiento y se desmayó”. “Fuimos de urgencia al Centro de Salud Viver. Sufrió un paro cardíaco y
Consiguieron reanimarla con un desfibrilador. y allí se decidió enviarla al Hospital Clínico de Valencia. “Un equipo de pediatría estaba esperando su llegada, pero era tarde ese día. A pesar de todo, apenas ingresó al centro decidieron operarla para ver qué tenía”, dijo el padre, aunque en ese momento tampoco pensaron en una peritonitis. La niña volvió a sufrir un paro cardíaco y falleció en este centro. Su muerte fue en la madrugada del lunes 6 de abril.

autopsia del cuerpo

“Lo más duro es que incluso esa noche, cuando les advirtieron que todo podía haber comenzado con una apendicitis, no supieron decirnos que había muerto”, dijo Ramón. “No fue hasta que hicieron la autopsia que supimos la causa de la muerte, una
peritonitis purulenta con una infección de la sangre». Por supuesto, para los padres la muerte de Emma se podría haber evitado, pues advirtieron que podía ser precisamente eso, pero Ramón tampoco se cansa de repetir que una sola prueba habría dado indicios de apendicitis y una ecografía habría detectado la inflamación de esta parte del intestino a la vez.

Apoyo del representante del paciente

El padre también ha dicho a LAS PROVINCIAS que ya se han puesto en manos de abogados para iniciar una demanda contra el Departamento de Salud por supuesta negligencia médica. «
Es evidente que no se ha tomado ninguna medida ante síntomas claros, especialmente a pesar de nuestras advertencias sobre antecedentes familiares de la enfermedad.». Además, Ramón ha indicado que la Asociación de Defensa de Pacientes se ha puesto en contacto con él y su mujer, quien ha manifestado que derivarán el caso a la fiscalía para que investiguen hasta el final qué ha pasado y si los servicios sanitarios han sido negligentes. .

En respuesta a una pregunta de LAS PROVINCIAS,
Fuentes de la Consejería de Sanidad han afirmado que «lamentan profundamente lo ocurrido y se ponen a disposición de la familia. Agregaron que analizarán lo ocurrido en este caso.