Los documentales de Rocío Carrasco sobre Telecinco siguen generando una gran variedad de opiniones y comentarios en la sociedad española, pero parece que en Telecinco, y especialmente en su presentadora Carlota Corredera, solo las opiniones e historias a favor de la hija de Rocío Jurado y su marido son válidas después lo que el reconocido periodista escribe este sábado María Eugenia Yague en LOC por EL MUNDO, y cuyos artículos recogemos atendiendo al interés del caso.
Las declaraciones de Rocío Carrasco en Telecinco, divididas en distintas partes, han provocado reacciones inesperadas en todos los sectores de la sociedad, incluida la clase política. Las dos españolas han reaparecido cuando alguna vez dejaron de existir, con posiciones incompatibles. Para Mediaset De lado, que defiende el mensaje de Carrasco con un apego inquebrantable y sin fisuras, solo hay lugar para un pensamiento. Quien no lo comparte es traidor, malvado o estúpido. El análisis, los hechos probados y las tesis jurídicas que presentó la periodista Rebeca Perfectamente a Yanke en este diario, no se les tiene en cuenta porque diseccionan gran parte del discurso del protagonista.
Por otro lado está la militancia, que se autodefine como una feminista extrema, como la ministra Irene Montero o la portavoz socialista Adriana Lastra, que se apresuraron a registrar el auto de la denuncia sin tener en cuenta la presunción de inocencia del imputado por todos los males de el denunciante. Como si la izquierda tuviera el monopolio de la defensa de las mujeres maltratadas, un tema que se ubica por encima de las ideologías y los partidos.
En un artículo reciente, Elvira Lindo decía del docudrama de Rocío Carrasco que el maltrato es una cosa, un tema terrible que necesita un tratamiento riguroso, y otra, bien distinta, es la pelea de un divorcio tormentoso, más propio de los programas Heart Than a denuncia documental.
Y en medio de ambos campos, los transeúntes de sentido común y aquellos con memoria que se pierden preguntas, respuestas y testimonios básicos se han olvidado deliberadamente para ayudar a establecer el equilibrio en una dirección. En algunos medios de prensa y redes sociales, muchas personas se quejan del sesgo de Rocío, diciendo la verdad que deben mantenerse con vida donde no aparecen todos los actores de la historia.
El programa no le da a Antonio David Flores la oportunidad de defenderse, precondenado y etiquetado de abusador, a pesar de que los tribunales han negado hasta en tres ocasiones que el daño psicológico que su ex esposa afirmó haber causado fue causado por el ha sido ex Guardia Civil. Estas sentencias no se mencionaron ni se tuvieron en cuenta en los distintos capítulos.
¡Las distintas exclusivas de Rocío Carrasco para la revista! ¡Hola! En los últimos años, bien pagados, transmiten esperanza y optimismo, lejos de la depresión crónica que dice padecer por culpa de su exmarido.
Por su parte, Rocío Flores intentó intervenir durante la emisión del primer episodio en directo y fue rechazada, aunque es muy probable que Mediaset le ofrezca presentar su versión de la historia dentro de un tiempo determinado.
Los propios periodistas de la cadena hacen preguntas como Ana Rosa Quintana: «Ella (Rociíto) denuncia que le quitaron sus hijos, y para mí no hay nada que explique por qué no ves a tus hijos». Una reflexión compartida incluso por espectadores que no dudan del sufrimiento que pudo haber sufrido la hija de Rocío Jurado durante esos años de contienda familiar, pero saben que ningún juez dictará que una hija se mantenga alejada de su madre por tiempo indefinido o al revés. Un juez toma medidas de precaución cuando escucha las quejas de uno u otro, pero solo hasta que se aclaren los hechos, no para siempre.
Carrasco se cruzó con su hijo David en la corte en 2018 y no le hizo ningún gesto al joven de 19 años con una notable discapacidad intelectual, que tenía 12 años cuando se produjo la batalla madre-hija y no intervino en el enfrentamiento. En un plató de telecinco comentaron que la jueza Rocío Carrasco dijo: «Ahí tienes a tu hijo, está aquí, habla con él y puedes arreglar las cosas», sugerencia que la madre ignoró.
Los miembros de la familia Jurado Mohedano y los periodistas que siguen la vida y las maravillas de la famosa saga extrañan a alguien que se pregunta por qué estos dos niños eligieron vivir con su padre y dejar la casa de su madre, de quien por otro lado nunca se han negado. Las únicas insinuaciones que escuchó de su boca fueron extrañarla y abrazar el rumor de que una llamada de la hija a la madre fue respondida con un «No vuelvas a llamar a esta casa». La esposa de Antonio David Flores confirmó estos días a través de los sobrevivientes que «Rocío Flores llamó a su mamá y colgó. Es inhumano».
El papel de Fidel Albiac en relación con los dos hijos de su pareja es otra incógnita que se evita en los debates posteriores a las entrevistas de Carrasco. ¿Crió a los pequeños demasiado estrictamente? ¿Eso tuvo algo que ver con lo que inició la histórica batalla que enfrentaron madre e hija para siempre el 27 de julio de 2012?
Como dijo Alessandro Lequio en el programa de Ana Rosa, una de las pocas voces que no concuerda con el mensaje del documental: «Fidel secuestró a Rocío».
Lo cierto es que el sevillano que se enamoró de la hija del mayor, sin estudios previos ni profesión conocida, hizo el tremendo esfuerzo de estudiar la carrera de Derecho en la Universidad a Distancia con el único objetivo de convertirse en el Desplegado de su esposa. defensa.
La pareja, apenas desprovista de vida social y recientemente ocupada produciendo un espectáculo en honor a Rocío Jurado, lleva todos estos años demandando a la ex Guardia Civil por la que piden prisión y una indemnización económica de cientos de miles de euros, que si fueran ejecutados hubieran dejado a sus hijos, luego menores, solos y sin recursos. Las denuncias se extienden también a Olga Moreno, a quien la joven Carrasco-Flores considera madre.
Muchas mujeres maltratadas no se reconocen en una Rocío Carrasco que llora con los ojos sin que se le corra el rímel y podría haber sido recompensada con dos millones de euros. «
Un articulo de María Eugenia Yague en LOC desde el mundo
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