El 27,6% de los trabajadores de La Rioja podrían teletrabajar en los próximos años, la segunda tasa más baja de España

LOGROÑO / MADRID, 27 de julio (EUROPA PRESS) –

Ese El 27,6% de los trabajadores de La Rioja podrían teletrabajar en los próximos años, 3 puntos menos que en el resto del país, según un informe de Randstad Research sobre el teletrabajo en España.

PARA A nivel nacional, el teletrabajo seguirá creciendo más allá de la pandemia, impulsado por la digitalización y los beneficios para la sociedad, y permitirá que el 30,6% de los españoles trabajadores trabajen de esta forma en los próximos años.

Este porcentaje casi duplicará la última tasa de teletrabajo disponible (16,6%) lo que, según Randstad, demuestra que hay mucho margen de crecimiento en este tipo de trabajos.

Sin embargo, el estudio muestra que, según los datos del CIS recopilados por Randstad, al 62,6% de los trabajadores les gustaría seguir trabajando de forma remota.

La estimación de las Comunidades Autónomas sobre el porcentaje de ocupados que podrían realizar teletrabajo es en conjunto superior al último dato registrado en el primer trimestre del año. Según Randstad, esto indica una potencial revolución en el mundo del trabajo tanto en España como en muchos países.

Las mayores tasas de teletrabajo se encuentran en la Comunidad de Madrid (casi el 36%), seguida de País Vasco (34,2%) y Cataluña (33,5%). Randstad ha manifestado que esto podría estar relacionado con el tamaño de las áreas metropolitanas, lo que generaría un mayor incentivo para el teletrabajo debido al mayor potencial de ahorro de tiempo y costos en el transporte.

Le siguen Asturias (32,1%), Navarra (29,9%), Galciia (29,5%), Comunidad Valenciana (29,2%), Aragón (28,6%), Cantabria (28,3%)), La Rioja (27,6.). %), Andalucía y Castilla y León (ambos con un 27,5%).

Por su parte, las tasas de teletrabajo más discretas del país se registran en Extremadura (27,4%), Canarias, Castilla-La Mancha (ambas con 27,2%), Murcia (26,7%) y Baleares (26, 3a) %).

En cuanto a los sectores, las áreas de información y comunicación (67,3%), actividades inmobiliarias (64,2%), educación (61,1%) o actividades financieras y de seguros (61%) aumentarán en los próximos años.

El estudio de Randstad también analizó los efectos que podría tener la introducción del teletrabajo en aspectos como la productividad de las empresas y los efectos positivos incluyen una mejor concentración por menos ruido e interrupciones, más autonomía en la organización del trabajo o una mayor motivación por la autonomía y la flexibilidad horaria. y geografía. El posible aumento de la jornada laboral y la reducción de los días de enfermedad también son positivos.

Lo negativo, sin embargo, son el menor nivel de interacción con los compañeros, el menor nivel de motivación por la soledad y el solapamiento entre el trabajo y las necesidades personales, así como la falta de espacio para el teletrabajo o la falta de ayudas técnicas adecuadas.

Para Randstad es necesario impulsar medidas para crear barreras entre el tiempo laboral y el tiempo privado. También destaca el impacto potencial que podría tener el teletrabajo en las políticas de transformación urbana y regional para promover un desarrollo y crecimiento equilibrado de las distintas áreas urbanas y rurales en línea con el cambio tecnológico.

Por otro lado, es necesario impulsar políticas que fomenten la creación de empleo y la mejora de la empleabilidad de las personas que se han visto perjudicadas por la crisis y el auge del teletrabajo y que tampoco pueden teletrabajar.

Por último, Randstad ha resaltado la importancia de ayudar a los trabajadores que tienen más dificultades en la transición al teletrabajo, adaptándose a la heterogeneidad existente a nivel laboral y personal y utilizando soluciones flexibles que maximicen el rendimiento y el bienestar.