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El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha reiterado que el Gobierno regional no se plantea introducir hoy nuevas restricciones a menos que los datos del coronavirus cambien radicalmente en los próximos días.
Martínez Guijarro, por ejemplo, respondió a las preguntas de los periodistas durante una rueda de prensa en Cuenca, donde dijo que la Comisión de Salud Pública se reunirá en los próximos días para «no solo analizar datos sobre infecciones que son importantes», sino también la situación hospitalaria. con el número de ingresados tanto en la cama convencional como en la unidad de cuidados intensivos.
Sin embargo, insistió: «Si la situación no cambia radicalmente, no estamos pensando en introducir hoy nuevas restricciones en la Comunidad Autónoma».
Respecto al proceso de vacunación de Covid que se inició hace apenas un año, la vicepresidenta autonómica destacó que ya se han administrado 3,7 millones de vacunas en Castilla-La Mancha, que es el 99% de las dosis dadas por las autoridades sanitarias.
Por ejemplo, 1.700.000 castellano-manchegos ya cuentan con póliza completa y tres dosis para mayores de 60 años y para trabajadores sanitarios y profesionales con actividades imprescindibles y de riesgo.
Han comenzado a dar la dosis de refuerzo a las personas mayores de 50 años, se han abierto centros de vacunación masiva para dar un refuerzo y, a principios de año, planean comenzar con las dosis de refuerzo a las personas mayores de 40 años.
Martínez Guijarro ha señalado que se ha confirmado que el impacto negativo en el hospital inferior provocado por la variante Omicron está directamente relacionado con la vacuna.
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, recordó el aniversario de la primera vacunación de la vacuna Covid-19 administrada a Araceli, usuaria de la residencia Los Olmos en Guadalajara y auxiliar de enfermería, y está convencido de que el próximo año 2022 “será el último año para poner el virus en su lugar”.
«Un año de soluciones después de un año espantoso», dijo el country manager en un comunicado y llamó a toda la sociedad a abordar el nuevo año con miras a la solución y no a «recrearse en el problema». Convencido de que esta actitud es el “mejor homenaje” a todos los que han estado “en la carretera desde que surgió el virus en China”, dijo.
García-Page nos invitó, acostumbrado a escuchar los nombres científicos del virus y sus variantes, que se popularizaron de un día para otro, «a seguir con el apellido Araceli, el primer anciano vacunado en España». con alegría, disciplina y ánimo ”y subrayó el ejemplo de su decisión.
«Araceli fue un punto de inflexión personal para mí y quiero que lo sea para todos», dijo.
El mandatario regional recordó «cómo la impotencia, el desconocimiento y la incertidumbre sobre el futuro jugaron el papel principal en 2020» y está convencido de que el próximo año será «un tiro de salida para la motivación, la autoestima, la economía y el empleo y básicamente la esperanza». señaló.
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