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Isabel Díaz Ayuso anuncia nuevas medidas en materia de vivienda. La presidenta de la Comunidad de Madrid, en un acto con los principales directivos de las empresas y patronales del sector inmobiliario, ha reactivado el Pacto Regional por la Vivienda, cuyo origen se remonta a 2020, con una batería de diez medidas para mejorar la accesibilidad a la vivienda de los jóvenes y familias.
«Madrid es la región con mayores expectativas de crecimiento de toda Europa. La vivienda tiene que ser un aliado que no deje a nadie atrás. Necesitamos que Madrid se expanda de forma equilibrada y los jóvenes y las familias puedan tener una vivienda digna a un precio normal que les permita tener un buen poder adquisitivo», señaló Díaz Ayuso. La presidenta defendió algunas de las medidas ya ejecutadas en los últimos, como el Plan Vive, los avales hipotecarios para la compra de una casa por parte de personas menores de 35 años, tres rebajas fiscales o la aprobación de la Ley Ómnibus.
Díaz Ayuso ha pedido la colaboración del Gobierno para solventar el problema de la vivienda. «La Comunidad de Madrid está realizando un trabajo importante para mejorar la accesibilidad a la vivienda. Necesitamos que otras administraciones se sumen a la tarea. La primera, la Administración General del Estado, que debe crear un escudo fiscal para la vivienda. También, es responsabilidad del Estado afrontar okupación ilegal que permita desalojar okupas en 24 horas en cumplimiento de nuestro estado de derecho», señaló.
Nuevas ayudas a la compra de vivienda
La Comunidad de Madrid está preparando una batería de medidas fiscales para ayudar a la compra de una vivienda. Esta incluirá una nueva deducción por intereses de préstamos hipotecarios a tipo variable y por adquisición de una vivienda por nacimiento de un hijo. En municipios en riesgo de despoblación se deflactará el IRPF a los nuevos residentes que compren una casa y no pagarán impuestos por la operación (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales o Actos Jurídicos Documentados).
En paralelo, el Ejecutivo regional ampliará los fondos asignados al programa Mi Primera Vivienda, que avala la parte de la hipoteca no financiada por las entidades financieras a jóvenes. En la primera y segunda convocatoria se movilizaron 36 millones de euros, con la participación de Caixabank, Banco Santander, Ibercaja, ING, Unicaja y Kutxabank en el programa. En esta ocasión, la partida presupuestaria no se conoce, pero la presidenta ha anunciado que será más ambiciosa. Carolina Roca, presidenta de Asprima, cifró en 200 millones de euros en avales la posibilidad de dar acceso a una vivienda en compra a 5.000 jóvenes al año. El tope de edad para beneficiarse pasa de los 35 a los 40 años y podrán acogerse familias numerosas, monoparentales o por nacimiento de un hijo.
Medidas y ayudas al alquiler
En el caso del alquiler, la mayor parte de las medidas y ayudas que se aprobarán en los próximos meses persiguen el objetivo de incentivar la puesta en el mercado del alquiler de viviendas por parte de propietarios. Los caseros podrán aprovecharse de una deducción por movilizar casas en desuso y de los gastos derivados del propio arrendamiento.
La Comunidad de Madrid creará el Plan Alquila Plus, que se suma al Plan Alquila ya existente, que conecta a demandantes de vivienda con caseros que disponen de una y gracias al que se han firmado más de 100.000 contratos. Además, se desarrollará el Plan Alquila Comparte, destinado a propietarios que quieran arrendar sus pisos por habitaciones.
Medidas para aumentar la producción de vivienda
Son varias las medidas puestas en marcha para fomentar la promoción y construcción de nuevas viviendas. La más importante y demanda por el sector la revisión del precio del módulo de vivienda protegida, que limita el precio máximo de venta de un inmueble de estas características. El importe no se actualiza desde 2008 y, con la subida de los costes, hace inviable su puesta en marcha. La Comunidad fijará un nuevo precio que se actualizará anualmente, que esperan que sirva para construir de forma inmediata 30.000 nuevos pisos. Además, en la redacción de un nuevo reglamento de vivienda protegida, se recuperará la figura del arrendamiento con opción de compra.
El Ejecutivo regional permitirá también durante dos años reconvertir edificios o suelos destinados a uso de oficinas en viviendas que se destinen al alquiler. Según estimaciones realizadas por EY hace unos meses, trasformar los edificios existentes y en desuso permitiría desarrollar 20.000 nuevas casas solo en la capital. También, a través de Aval Madrid, se concederá financiación a cooperativas a la promoción de vivienda en alquiler asequible y se creará una línea de ayudas, con cargo al Programa de Inversión Regional, que permitirán a los municipios con menos de 20.000 habitantes comprar en el mercado suelo y casas para rehabilitarlas y alquilarlas.
Según comentó Isabel Díaz Ayuso, la Comunidad de Madrid seguirá flexibilizando la legislación en materia de urbanismo y suelo para acortar plazos, que permita simultanear los trámites con la edificación el desarrollo de suelo. En esta línea, el Gobierno regional planea activar nuevas parcelas de la red supramunicipal para seguir desarrollando vivienda, fuente de los suelos del Plan Vive, que actualmente tiene 8.500 pisos en desarrollo de la mano de promotores y fondos de inversión.
Por último, el Ejecutivo quiere convertir Madrid en «el mayor hub de industrialización de España«. Dentro de esta intención, se incluirán incentivos a empresas que instalen sus parques tecnológicos para el desarrollo de vivienda industrializada en Madrid.
Sintonía con la patronal
En el acto del relanzamiento del Pacto Regional por la Vivienda participó Carolina Roca, presidenta de la Asociación de Promotores de Madrid (ASPRIMA), que agradeció la buena predisposición de la administración regional. «Coincidimos en el diagnóstico del problema de la vivienda, la falta de oferta, pero no somos conscientes de la dimensión. El déficit de viviendas anual en la Comunidad de Madrid es de más de 20.000 unidades, teniendo en cuenta el número de hogares creados y los inmuebles construidos. La vivienda infraestructura social que se financia con fondos privados: entre los años 1980 y los 2000, el sector promotor produjo 3,2 millones de viviendas de protección pública sin consumir recursos públicos», señaló.
Dentro de su intervención, Carolina Roca exigió expuso seis puntos de mejora que ayudarían a solventar el problema de la vivienda: El primero, una modificación de la Ley de Suelo, que suponga un cambio de paradigma, con el fin de activar la construcción de 90.000 pisos en los próximos cuatro años y dar salida a suelos sin edificar o inmuebles ya construidos sin uso. También solicitó un marco jurídico y económico estable donde se reduzca la carga burocrática y se actualice el precio del módulo de la vivienda protegida. La presidenta de Asprima exigió también más financiación para familias con recursos a la hora de comprar de una casa, una rebaja impositiva a la construcción de viviendas asequibles y más formación y flexibilidad para aumentar la mano de obra de la construcción. «Si queremos duplicar la construcción de viviendas, necesitamos duplicar la financiación. Tenemos que salir a captar ese capital a nivel internacional y explicar que las políticas regionales son diferentes a las estatales«, concluyó.
En un comunicado, la Asociación Madrileña de Empresas Inmobiliarias (AMADEI), participante del Pacto Regional por la Vivienda, ha señalado: «El pacto ha de ser una hoja de ruta que permita establecer con claridad las problemáticas y retos del sector inmobiliario. Si todas las medidas propuestas por el gobierno autonómico se acaban llevando a cabo, podremos decir que el mercado de Madrid habrá dado un paso de gigante para la creación de un parque inmobiliario sostenible, capaz de absorber las necesidades de la demanda y con incentivos fiscales interesantes para particulares e inversores. Los sectores público y privado han de trabajar unidos para seguir mejorando nuestro mercado de la vivienda en favor del ciudadano».
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