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Según las encuestas, las mujeres tardan una media de 20 años en denunciar su situación de maltrato, frente a los casi nueve años que tardan las mujeres de ciudades o pueblos de más de 20.000 habitantes.
La Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familia e Igualdad, a través del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), desarrollará un protocolo específico que incluirá buenas prácticas y un plan de atención y seguimiento dedicado a la atención integral de la mujer rural en los ámbitos que puedan convertirse en víctimas de la violencia de género.
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