Aprendió a tocar la trompa después de que su hija muriera en un accidente de tráfico mientras asistía al conservatorio.
José Luis Pulpeiro tiene 65 años, pero han pasado 19 años desde que él y su esposa Macu el reloj se ha detenido: Un golpe así nunca ha terminado. Esta ferida xamais sana, Él dice. Fue el que abrió la mañana del 12 de noviembre de 2002 cuando su única hija, AlmudenaCogió el coche para conducir de Ribadeo a Lugo para asistir al Conservatorio Profesional de Música. Estaba en ruta por la N-640, en uno de los tramos con mayor tasa de accidentes de España. Fue un segundo fatídico que media entre la vida y la muerte. El automóvil en el que conducía fue atropellado por otro vehículo que pasó a un camión. El informe de tráfico echa más sal a la herida de la memoria: una maniobra ilegal.
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