Hubo un tiempo no muy lejano en el que el Guadiana empezó a contaminarse y no había piscinas para cada parcela o comunidad de vecinos, donde el embalse de Campomayor, Portugal, era el lugar para bañarse para muchos Badajoz. Este embalse sigue conservando su encanto y la calidad del agua que contiene su presa y, en la actualidad, está más lleno que la mayoría de los pantanos extremeños.
A pesar de estar en un terreno accidentado, algo mejora cada año, tanto porque se construye un camping con vista al atardecer, el chiringuito, ahora llamado ‘Sunset’, es renovado por otro comerciante, porque en algunas playas le proporcionan un muelle. al atraque de embarcaciones o simplemente porque el acceso desde España, una carretera que la conecta con la frontera de Campomayor en menos de media hora, mejora el firme de la calzada, que hace un par de décadas era un calvario lleno de agujeros.
El embalse de Campomayor es el mayor embalse (albufeira) de la comarca de Portalegre. Se construyó para abastecer a los municipios de Elvas y Campomayor y, desde 2007, también a los de Arronches o Monforte. No olvides que el agua dulce que filtra la presa va al río Caya, que llega a Badajoz y ayuda a llenar el Guadiana.
Explorando los senderos hacia la cola de la cuenca hay costas que parecen playas
Excepto en la zona de la presa, se permite la natación, el piragüismo o el windsurf además de la pesca. Y es esta última actividad náutica -ahora también el kitesurf, en auge- la que le da al lugar un ambiente especial, llegando a encontrarse en una tarde, si las previsiones lo permiten, decenas de tablas con sus cometas y velas que atraviesan el agua y animan. Las vistas. Es porque el viento entra limpio gracias a la orografía. Esta ausencia de marcados desniveles también permite que sus orillas sean más cómodas y accesibles, sin olvidar que estamos en una zona pedregosa, aunque explorando su cola, hacia el municipio de Santa Eulalia, puedes encontrar auténticas playas donde pasear. descalzo y extender la toalla. .
Justo enfrente de la presa, que es la zona más transitada, ahora hay una isla con un pequeño bosque en el centro, pero cuando baja el nivel del agua es posible acceder a ella por el istmo emergente y así disfrutar de un agradable paseo.
Y aunque el entorno es rústico y salvaje, no hay que olvidar que a cinco minutos se encuentra la ciudad de Campomayor con todos los servicios y el encanto que ofrece la gente del Alentejo, desde su patrimonio histórico hasta sus cafés o dulces, entre otros atractivos para Quienes no frecuentan esta parte acuática de la Raya y se animan a conocer este rincón.
Comments