Teresa Rodríguez se presenta como la voz del “andalusismo libre” y yuxtapone su modelo con el de Juanma Moreno

La segunda jornada de debate sobre la toma de posesión de Juanma Moreno en el Parlamento andaluz se abrió este jueves con la intervención de los grupos políticos menos a los más representados. La encargada de abrir fuego fue Teresa Rodríguez quien, en su primer discurso en esta nueva legislatura, dejó claro cuál será el eje de su discurso en este mandato, ya que se presentó como la voz del “andalusismo libre”. sin estar ligado a los dictados de los partidos políticos madrileños y ha contrastado sus recetas y modelo político con el defendido por el candidato a la reelección como Presidente de la Junta Directiva.

Rodríguez ha anunciado que junto a su compañera Maribel Mora formarán un «bocadillo andaluz» que aportará la «dosis de andalusismo» adecuada al Parlamento en cada sesión para defender a la comunidad «sin la guía de un cuartel madrileño». «No somos muchos, pero dos voces andaluzas verdaderamente libres a veces pueden valer más que 107 silencios interpretados en Madrid», subrayó en una declaración de intenciones para diferenciarse del resto de grupos y en particular del PP y Moreno, el realizado la bandera de Andalucía durante la campaña electoral.

La portavoz de Adelante Andalucía, que afeó al PP al ceder un puesto en la mesa de cámara a Vox, ha acusado a Juanma Moreno de «repetir» promesas que hizo en su discurso de investidura hace cuatro años y recordarle sus incumplimientos. Entre los primeros ha enumerado el plan de dinamización de la industria andaluza, la ley flamenca, las guarderías gratuitas de 0 a 3 años o una ley de formación profesional, mientras que entre los segundos ha preguntado al líder popular si ha omitido en su intervención medidas de regeneración democrática. como la eliminación de cargos directivos y el sistema de libre designación, la obligatoriedad de las recomendaciones de la Cámara de Cuentas o la reforma de la ley electoral.

«El milagro económico andaluz solo existe en su cabeza»

Teresa Rodríguez ha mostrado su sospecha de que Moreno sea presidente de todos los andaluces porque hay «intereses contrapuestos en la sociedad y no se puede gobernar para todos» y le ha acusado del llamado «milagro económico andaluz» que sólo existe en su cabeza. porque olvida que hay situaciones de desigualdad social” y al frente del gobierno están “las élites extractivas, los grandes terratenientes y los buitres y los fondos de inversión”.

En este punto, Rodríguez dejó claras las diferencias entre su modelo político y el del PP, como el modelo productivo, donde recordó que no apuesta por la industria sino por el turismo, donde denunció el ‘turismo’ y sus efectos; en salud, donde denunció que fue «peor» que 2018; en educación, con la supresión de unidades y recortes en la financiación universitaria; en política de agua y energía; o en materia fiscal.

Sobre este último tema, la portavoz de Adelante Andalucía ha defendido que el anuncio de una rebaja fiscal de 620 millones de euros en cuatro años equivale a no contratar 14.000 sanitarios y 6.000 profesores. “Cada vez que le hacen agujeros a la alcancía de todos, nos reducen la herencia que recibimos, estos son servicios públicos”, denunció.

Moreno: «Nadie me va a dar lecciones de andaluz»

Juanma Moreno, por su parte, ha acusado a Teresa Rodríguez de su “monopolio” de los sentimientos andaluces. “Me siento tan andaluz como tú y defiendo Andalucía tanto como tú. Nadie me puede dar lecciones de andaluz. Ante todo, defenderé Andalucía», ha subrayado.

Moreno ha confirmado que hay «una distancia más que considerable» entre el modelo del PP y el de Adelante, y en este punto ha afirmado que si él y Rodríguez se sentaran en salas distintas para hacer un diagnóstico, las conclusiones coincidirían de los problemas de Andalucía . pero las soluciones serían otras porque las recetas de la coalición de izquierda han demostrado ser «impracticables».

“Sus recetas no son viables, no tienen posibilidades de ser viables y no resuelven los problemas de los ciudadanos. Cuando se aplican en un país, han sido un gran fracaso en términos de bienestar social, empleo y progreso. Frente a la visión poética, la dura realidad exige rigor, pragmatismo y cercanía”, explicó mientras defendía las medidas que impulsará su gobierno, con especial énfasis en la reducción de impuestos.

A pesar de los desacuerdos expresados, ambos mandatarios han mostrado su voluntad de dialogar durante la recién instaurada legislatura.