¿Qué une a Pinto con Alburquerque? Lo que. O hasta hace apenas un mes, absolutamente nada más que los 382 kilómetros de carretera entre un pueblo y otro. Pero durante unas semanas hay un vínculo social. Este municipio madrileño pensó que era hora de intervenir y se movilizó para recoger alimentos para los trabajadores afectados por la morosidad salarial de Albuquerque.
Fue por casualidad que Reyes Cañete encendió la televisión un día cuando regresó a casa y vio en las noticias una manifestación de empleados municipales de Albuquerque protestando porque en algunos casos les debían hasta once cheques de pago. A este trabajador del Ayuntamiento de Madrid le sacaron las entrañas. “No es normal que haya trabajadores a los que no se les paga desde hace once meses”, se queja y, a su vez, se pregunta cómo sobrevive un trabajador sin recibir una compensación económica durante tanto tiempo. Con ese sentimiento de justicia social, y sin conocer a nadie de Albuquerque, propuso a sus compañeros hacer algo por las 200 familias afectadas.
Un grupo de Getafe también quiso colaborar en la iniciativa. /
“Busqué información, llamé al Ayuntamiento, me puse en contacto con algunos trabajadores y desde entonces hablo con ellos varias veces a la semana”. Reyes, que habla en nombre de todo el colectivo que apoya la causa, no entiende cómo pudo haberse producido esta situación y cree que si esto hubiera sucedido con un municipio de Madrid, el problema ya estaría resuelto. Para Reyes, hay poca cobertura mediática sobre «este grave problema».
Así describe la trabajadora madrileña la crisis que atraviesan muchas familias en una ciudad con la que hasta ahora no tenía ningún vínculo. La campaña no se trata solo de recolectar alimentos y equipos. La red de apoyo es tal que incluso se puede contar con una declaración institucional aprobada por unanimidad por el Ayuntamiento de Pinto en pleno. «Se hizo con La Palma, porque no tiene nada que ver con Albuquerque».
Reyes Cañete forma parte de un sindicato y es miembro del comité de empresa del Consistorio de Pinto, pero para ella no es una cuestión de política. «Es una forma de apoyar a los colegas que lo están pasando mal», explica. No es la primera vez que se mueven por una causa similar, pero nunca habían asumido tales dimensiones. “¡Incluso en Getafe recogen comida! Tuvimos suerte porque hay mucha gente de apoyo y se han involucrado ”, dice muy emocionada.
Con este despliegue esperan recoger hasta siete toneladas de alimentos que traerán a Extremadura el próximo 17 de diciembre. “Solo necesitamos la camioneta”, se ríe mientras asegura que este es el mínimo, “porque nosotros también lo tendremos”, confiesa Cañete. Y si es así, cubrirán los 382 kilómetros que hasta ahora eran lo único entre Pinto y Alburquerque.
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