Madrid cuenta con 3.300 comercios no permanentes que deambulan por la capital y venden en los mercadillos. La pandemia les dio el impulso a digitalizarse y ahora están unificados bajo la marca en internet y redes sociales. Mercados de MadridIncluso tienen su propia aplicación móvil: Madtreet.
Y tienen presencia en Facebook, Twitter e Instagram con información sobre ropa vintage y bibliotecas itinerantes. La aplicación comprueba qué productos se venden, si hay ofertas y cada stand dispone de una ficha con información para contactar con el minorista. El objetivo es que esta forma de comercio tradicional dé el salto a la economía digital y sostenible sin perder su popularidad y su carácter cercano.
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