By 
Se cerrarán 38 plazas al finalizar la segunda dosis pendiente
L’HOSPITALET DE LLOBREGAT (BARCELONA), 29 de septiembre (EUROPA PRESS) –
La secretaria de Salud Pública de la Generalitat, Carmen Cabezas, ha dicho este miércoles que el Gobierno empieza a cerrar los puntos de vacunación de Covid-19 y mantiene abiertos 21 de los 60 que ha habilitado para dar dosis como parte de una estrategia de optimización de la vacunación.
En declaraciones a periodistas del centro de vacunación La Farga en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Cabezas indicó que estos 21 puntos están dedicados a la primera y segunda dosis, mientras que 38 administrarán las segundas dosis restantes. .
De esta forma, Cabezas previó que dado que Pfizer es la vacuna más administrada en Cataluña y tiene un ciclo de 21 días, en unas tres semanas esos 38 puntos se cerrarán para la segunda dosis y solo 21 permanecerán activos.
Cataluña ha llegado al 80,7% de la población mayor de 12 años totalmente vacunada, por lo que el Ministerio de Sanidad considera superada la primera fase de la campaña de vacunación y reduce el número de plazas para la administración de dosis y aumenta las estrategias comunitarias.
Cabezas destacó el trabajo que se está realizando en el centro de vacunación de La Farga, que ha entregado cerca de 400.000 dosis de vacuna desde su lanzamiento en abril y donde se han administrado hasta 7.000 vacunas en un día.
ESTRATEGIAS COMUNITARIAS
Como parte de esta optimización, Cabezas detalló que los profesionales de los puntos a cerrar se utilizarán para reforzar las estrategias de proximidad para vacunar a aquellas poblaciones que aún no han recibido una dosis.
Ha respaldado la labor de los profesionales que implementaron estas estrategias comunitarias en la primera fase de la campaña, las cuales ahora se fortalecen en colaboración con las instalaciones de atención primaria y vacunación en centros comerciales, mezquitas y mercadillos, entre otros.
CONVOCATORIA DE VACUNAS
El secretario hizo un llamamiento a los que aún no han sido vacunados, tanto en los centros de vacunación que están abiertos como en las estrategias comunitarias que impulsa el departamento: «Es muy importante», dijo.
Cabezas dijo haber telefoneado a más de 15.000 personas entre 20 y 40 años que rechazaron la vacuna o no quisieron vacunarse, «prácticamente la mitad de las cuales» piensan que es innecesario.
El segundo motivo de estas personas es el miedo a los efectos secundarios de la vacuna -el 27% del total de encuestados se refieren a ella- que Cabezas ha asegurado que la gran mayoría de esos efectos son molestias y sensación de cansancio y no perduran en el tiempo.
Cuando se le preguntó qué porcentaje de estas personas estaban en contra de las vacunas, la secretaria aclaró que no podía dar el número exacto, pero aseguró que era un porcentaje «muy bajo» de no más del 5%.
El secretario ha advertido que de las 146 personas actualmente ingresadas en unidades de cuidados intensivos (UCI), nueve tienen entre 20 y 40 años, y de esas ocho no están vacunadas.
Comments