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La Policía Nacional de la Unidad Central de Participación Ciudadana y toda la Jefatura de Policía destacan un nuevo método delictivo denominado «vacunación domiciliaria». Este nuevo método criminal tiene como objetivo defraudar a las personas mayores de 65 años y aprovechar la actual crisis de salud (COVID-19) para ingresar a sus hogares, dijo la policía en un comunicado de prensa.
Los infractores se comunicarán con los ancianos por teléfono, se harán pasar por trabajadores de la salud, concertarán una cita en el domicilio del ciudadano y así se beneficiarán de la vacuna COVID-19 sin tener que desplazarse a un centro médico.
Las vacunas no se administran en casa.
En realidad, quieren tener acceso al interior de la casa para cometer un delito (robo, hurto). Desde la delegación de participación ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Asturias, ya se han puesto en contacto con las asociaciones de personas mayores, centros sociales y asociaciones de vecinos para dar a conocer esta nueva modalidad delictiva.
También se recuerda que las vacunas no se administran en casa, sino solo en centros de salud u hogares de ancianos. Con todo ello, «nosotros en la Policía Nacional queremos evitar que el colectivo de ancianos o cualquier otro grupo sea víctima de este tipo de delitos».
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