Iceta reitera el compromiso del Gobierno de modificar el delito de sedición si hay mayoría

Niega que se pueda considerar una amnistía

BARCELONA, 24 oct (EUROPA PRESS) –

El ministro de Cultura, Miquel Iceta, reiteró este lunes el compromiso del Gobierno de «alinear» el código penal con la legislación de otros países europeos y de modificar el delito de incitación al odio si hay una mayoría parlamentaria para ello, pero lo desmarcó de la negociación presupuestaria.

Preguntado durante una visita a Correos de Barcelona si el Gobierno estaba dispuesto a reducir a la mitad la sentencia por sedición publicada este lunes por ‘El País’, respondió: «Lo que hace el Gobierno es lo que ha hecho el presidente, es decir, reafirmar la obligación de adaptar nuestra legislación a la legislación de los países europeos».

“Estamos comprometidos con esto y si tenemos una mayoría parlamentaria que lo apoye, lo haremos”, subrayó.

Ante la pregunta de si la reforma implicaba negociación presupuestaria, dijo que no, parafraseando al primer secretario del PSC, Salvador Illa, que «no se pueden mezclar cuadernos».

Ha explicado que lleva barajando la posibilidad de reformar el código penal desde 2017: «No es que no hubiera presupuestos, es que no estábamos ni en el Gobierno».

La ministra ha negado que una posible reforma de la sedición pueda considerarse una amnistía, afirmando que una amnistía «es un procedimiento extraordinario, cuando hay un cambio de régimen y se borran las causas penales, no es así».

Destacó que se trata de una reforma al código penal que se llevaría a cabo si se llegara a una mayoría y cuando se le preguntó si la tenía, respondió: “Si la tengo, te lo digo. Hay que revisar estas cosas. El día que haya una propuesta en el Congreso que tenga una mayoría, ese día podemos confirmar que hay una mayoría y se va a dar la reforma a la que estamos comprometidos”.

Ha manifestado que no le ha sorprendido la reacción de las distintas fuerzas políticas ante el compromiso anunciado por el Gobierno y ha asegurado que «todo el mundo se ha adaptado al escenario previsible».