La alcaldía exige a ERC "de la mano de una Generalitat que entienda Barcelona"
BARCELONA, 5 nov (PRENSA EUROPA) -
El candidato de ERC a la alcaldía de Barcelona, Ernest Maragall, ha asegurado que el futuro de la ciudad tras las elecciones municipales de 2023 es un debate entre él y la "segura continuidad" del alcalde socialista Jaume Collboni, actualmente primer teniente de alcalde del Gobierno del PSC Comuns.
Así lo explicó Maragall a los periodistas este sábado por la mañana durante la Jornada Municipalista d'Esquerra Barcelona en el Centre Cívic Pere Quart, el mismo día en que el PSC declaró candidato a Collboni.
Para el republicano, el proyecto Comuns, liderado por la alcaldesa y candidata a la reelección Ada Colau, "ya ha dado todo lo que podía".
COMÚN: NO SE PUEDE AÑADIR MÁS
“Se ve y se confirma todos los días que es incapaz de sumar, concretar, compartir ilusiones en un proyecto”, dijo sobre los Comuns.
En cambio, ha calificado de bastante obvio que el futuro está entre el PSC o ERC en esta "emocionante carrera" por ser el próximo alcalde de la ciudad.
Maragall defendió su candidatura frente a "la alternativa que sigue ofreciendo, de cierta continuidad, el socialismo y Jaume Collboni".
ERC: "Ambición y Transformación"
En cambio, ha definido a ERC como un "gran proyecto ambicioso y transformador de ciudad".
Por ello, cree que PSC y ERC son dos alternativas "desde el punto de vista de organización, concepto y oferta política que merecen ser confrontadas y entre las que la ciudad tiene que decidir".
Ha añadido que ERC "ofrece una potencia renovada con una realidad envolvente capaz de expresar el papel de Barcelona en el país y en Europa".
LA GENERALIDAD ACTUAL
Además, ve un valor añadido para su candidatura municipal en el nuevo gobierno de la Generalitat a solas con ERC: “Vemos en este equipo no sólo un aliciente, sino un motivo para confiar en nosotros mismos”.
Maragall se ve "en condiciones, con este liderazgo y complicidad con la ciudad, de ofrecer a los ciudadanos de Barcelona un gran proyecto conjunto, y hacerlo de la mano de un Gobierno de Cataluña que entienda Barcelona".
Ha asegurado que el actual Gobierno catalán es un ejecutivo para Barcelona, "que les quiere servir, que son capaces de entender que Barcelona representa un liderazgo del país al que no se puede renunciar".
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