Las elecciones examinan los cambios políticos en Andalucía
Por primera vez en 40 años, PP y PSOE afrontan la campaña electoral con los roles de gobierno y oposición invertidos
Andalucía inicia este viernes su campaña electoral y lo hace en una situación sin precedentes. Por primera vez en cuatro décadas -las primeras elecciones autonómicas se celebraron el 23 de mayo de 1982- el Partido Popular inicia una campaña electoral entre el Gobierno y el PSOE, la oposición.
El cambio político que se produjo en la pasada legislatura -la undécima en la historia de la autonomía andaluza- se examinará el 19 de junio y el escenario es inédito no solo por la inversión de roles de socialistas y electos, sino también por la gran cantidad de Desconocidos con los que esta campaña comienza el viernes a las 00:00. Todos los estudios demográficos publicados hasta ahora dan como ganador al Partido Popular y por eso la pregunta parece no ser qué formación conseguirá más votos, a pesar de que los socialdemócratas esperan una remontada de última hora, sino qué gobierno se puede formar a partir del reparto. de asientos resultado de las encuestas. Si se puede formar un gobierno.
No es la primera vez que el PP se erige como favorito al inicio de una campaña electoral. Esto sucedió allá por 2012, cuando tras la abrumadora victoria de Mariano Rajoy en las elecciones generales de noviembre de 2011, Javier Arenas se perfiló como el ganador seguro. Su insuficiente victoria, con 50 escaños y cinco mayorías absolutas, lo dejó a las puertas del Palacio de San Telmo. En esta ocasión, por primera vez en Andalucía, se celebraron elecciones en elecciones distintas a las generales. Desde entonces, no ha habido coincidencias en el tiempo entre ellos.
El panorama político actual es diametralmente diferente al de hace una década, y la principal diferencia es que el bipartidismo ha pasado a la historia, y con él las mayorías absolutas. De hecho, los 50 escaños que hace una década supusieron un fracaso y el final de la carrera política de Arenas en Andalucía serían ahora una clara victoria de Juanma Moreno o de cualquier otro candidato y el pase seguro a un gobierno para los próximos cuatro años.
El fin del bipartidismo y la disgregación del electorado fue precisamente uno de los factores que permitió a Andalucía hace tres años y medio iniciar el cambio político, cuya primera etapa se examina ahora. El bloque de derecha de PP, Ciudadanos y Vox suma por primera vez más escaños que la izquierda (PSOE y Adelante Andalucía), y la principal incógnita de cara a la campaña del 19J no es solo si la derecha sumará más que la izquierda para la segunda vez en la historia -lo que hablaría de un cambio sociológico en Andalucía más allá de un mero resultado electoral-, pero también de cómo quedarían compuestos los bloques, ya que de ello dependerá la formación del futuro gobierno.
A pesar de que el Partido Popular y su candidato Juanma Moreno se presentan con el objetivo de que su victoria sea lo suficientemente cómoda para que pueda gobernar en solitario, gran parte del debate preelectoral giró en torno a si el PP acabará pactando con Vox de ese partido en la entrada a la Cámara de Representantes. futuro gobierno.
No en vano, los dos momentos que rompieron la inercia política de la campaña primaria están directamente relacionados con este eventual pacto de gobierno. La primera fue cuando Juanma Moreno advirtió de su disposición a repetir las elecciones si de las urnas no salía la posibilidad de formar un ejecutivo viable. La segunda la protagonizó la candidata de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, que descartó la posibilidad de que sus parlamentarios se abstuvieran en el debate de investidura para evitar obligar al PP a abrir las puertas de San Telmo al partido de Abascal.
Ambos movimientos, los únicos reseñables desde que se convocaron las elecciones más allá de las anécdotas grotescas de la tardía presentación de Podemos y el excéntrico registro de Macarena Olona, demuestran que lo que parece ser el debate no es tanto quién gobernará Andalucía durante los años. como cómo y con quién.
Juanma Moreno sabe que el perfil moderado, centrista y andaluz que ha buscado para salir de una presidencia de junta que encaja en un proyecto a largo plazo de su partido y no acaba en esta convocatoria electoral, estaría muy tocado por un acuerdo que la entrada de Vox en la Junta de Andalucía. Y está convencido de que la única forma de evitar este escenario es una victoria contundente, para lo que debe desmovilizar al electorado de izquierda con su moderación y lograr un trasvase de votos socialistas. Ese es el blanco al que apuntará sus dardos, y ningún otro blanco, durante la campaña que comienza este viernes.
Además, se presentará -frente al patrocinio de Pedro Sánchez a Juan Espadas- como un candidato independiente y lo más desideologizado posible. Sus objetivos son tres: primero, ganar; En segundo lugar, sumar más escaños que toda la izquierda; tercero, gobierne solo.
Por otro lado, la estrategia socialista pretende bloquear la operación dirigida a su electorado, con dos mensajes contundentes que se acentuarán de camino a las elecciones: desmentir el relato oficial de que durante el mandato de Juanma Moreno los servicios públicos esenciales y conexiones del candidato popular en Vox tanto como sea posible. Si durante décadas los argumentos socialistas giraron en torno al peligro que supondría para la salud y la educación pública la eventual llegada del derecho a San Telmo, la apuesta ahora pasa a alertar de un peligro similar, pero con Vox como amenaza y el derecho de las mujeres como objetos de riesgo.
En el PSOE-A llevan tres años y medio achacando la pérdida de su baluarte andaluz a la desmovilización de su propio electorado -argumento que parecía confirmar el apoyo que recibió después de Pedro Sánchez- pero a las puertas de las elecciones , las encuestas no han señalado que estos votantes hayan salido del letargo. Los intentos de Juan Espadas hasta el momento, tanto con el argumento de los servicios públicos como con las advertencias de Vox, no parecen estar funcionando. Le quedan dos semanas.
Ciudadanos va camino de pagar en las urnas la estrategia puesta en marcha por Juan Marín durante los últimos tres años y medio, aparentemente encaminada a reproducir en una única apuesta electoral la imagen de cohesión que transmite el ejecutivo. La coalición gobernante no se transformó en coalición electoral y la única oferta que recibió Orange fue que todos sus concejales y el presidente del Parlamento fueran incluidos en las listas del PP como independientes. Tanto Arrimadas como Marín se negaron, asumiendo que la aceptación hubiera significado firmar el certificado de defunción del partido Orange. Ahora intentarán salvarla consiguiendo al menos representación de Sevilla, Málaga o Cádiz, las tres circunscripciones donde ven oportunidad.
Vox ve en Andalucía un paso más hacia las próximas elecciones generales y sus líderes no lo ocultan. Todo lo que no penetre en la Junta de Andalucía, como ocurrió en Castilla y León, es no conseguir el objetivo. Si bien prometen que ni siquiera se abstendrán a menos que sea a cambio de escaños en el Consejo de Gobierno, saben que solo lo harán con un resultado que se acerque a duplicar su representación actual. Por el momento, sus mensajes son más emocionales que programáticos, pero aún está por verse si eso cambia a medida que avanza la campaña.
El espacio de la izquierda del PSOE va para las urnas, lastradas no solo por la escisión entre las dos listas presentadas -Adelante Andalucía y Por Andalucía- sino también por la inequívoca escisión entre las dos fuerzas principales que componen esta última . Adelante Andalucía, la coalición que encabeza Teresa Rodríguez, parte de la posibilidad de conseguir un escaño para el Cádiz, mientras que con la desintegración rampante de Podemos, Por Andalucía confía todas sus opciones al tradicional arraigo de Izquierda Unida en el territorio.
El PP cierra la precampaña en Málaga y el PSOE en Jaén
El Partido Popular hará el paso de las primarias a las campañas electorales con un mitin de Juanma Moreno en el Parque de la Balsa Decantación de Málaga. Los socialistas empiezan en Jaén, donde su candidato Juan Espadas hablará en la Plaza de San Juan. Ciudadanos iniciará la campaña electoral en Jerez de la Frontera, donde coincidirán su candidato a la presidencia, Juan Marín, y la candidata por Cádiz, Rocío Ruiz. La candidata de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, actuará en la plaza de San Isidro de Algeciras, mientras que Teresa Rodríguez, de Adelante Andalucía, colocará carteles en Jerez de la Frontera. Macarena Olona de Vox se ha dado cita en la plaza Isabel la Católica de Granada.
asignaturas
Inmaculada Nieto, Javier Arenas Bocanegra, Juan Espadas, Juan Manuel Moreno Bonilla, Juan Marín, Macarena Olona, Mariano Rajoy, Pedro Sánchez, Teresa Rodríguez, Adelante Andalucía, IU Izquierda Unida, Partido Popular PP, Podemos, Por Andalucía, Vox, PSOE de Andalucía, PP de Andalucía, Elecciones Andalucía 2022
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