El último carro de toxos que llevan las vacas de los domingos

Manuel Fernandez

Ver Domingo Pérez Ron (Santa Maria do Trobo, A Fonsagrada, 1941), tirando del carro de sus dos vacas, es un viaje en el tiempo a la época de nuestros abuelos, cuando el Mecanización de campo parecía algo lejano e invaluable para los campesinos. Basta con mirarlo unos minutos para entender que es un lujo nacer y vivir en la Galicia rural que no todo el mundo conoce ni aprecia.

Domingo de Noceda -así lo llaman, refiriéndose al pueblo donde creció y donde ahora vive con sus dos perros- tiene más de 80 años, pero tiene la certeza de que está relacionado con el sector agrícola. la actividad morirá durante décadas. El que pertenece a una generación de hombres y mujeres fuertes que nacieron en medio de una guerra y en su propia piel la dificultad de vivir en un lugar remoto, ahora disfruta tu jubilación rodeado de montañas, en un pueblo a unos diez kilómetros de A Fonsagrada.

Pero Domingo de Noceda vive solo. No se ha casado y está acostumbrado a una vida rutinaria que comienza sin madrugar y termina cuando la naturaleza duerme, con la llegada de la noche. Su admiración por los animales se puede sentir a pocos metros de distancia. Es su mérito domesticar a sus dos vacas y Labranza manual los países donde jugaba de niño.