Solo cuatro comunidades autónomas han comenzado a descentralizar sus gobiernos

El presidente de la Generalitat de Valencia, Ximo Puig, uno de los políticos más implicados en la federalización de la administración, pidió este miércoles a su equipo que pise el acelerador para desagregar la representación de su gobierno en todo el municipio. Descentralizar las instituciones es una forma de conectar a los ciudadanos con ellas, han argumentado desde la presidencia de la Generalitat. Sin embargo, solo una consultora está fuera de la capital, a pesar de que tiene un presupuesto de más de mil millones de euros. Pero un rastro de direcciones generales, agencias y empresas públicas invade todo el territorio. La dirección general del turismo está en Benidorm; en Elche la autoridad autonómica de protección; en Orihuela, la oficina regional para el sur del municipio; en Alcoy, filial del Instituto Valenciano de Arte Moderno; en Castellón la autoridad de despoblación; en Torrent la Agencia Ferroviaria y en Sagunto un organismo autónomo dedicado a la promoción de áreas industriales.

A ello se suma la creación del Distrito Digital, unidad que se implantará en 16 ciudades de más de 50.000 habitantes para atraer empresas del sector digital y que ya ha atraído a más de 200 desde su sede de Alicante. Cada uno está vinculado a los sectores productivos más famosos de la ciudad, como el turismo Benidorms, las Gandas de la salud o, como era de esperar, Eldas de la industria del calzado. El equipo de Puig niega que la descentralización suponga más gasto público o un aumento de plantilla y lo limitará todo a su reorganización.

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