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Según los patrocinadores del proyecto, la obra que comenzó hace siete meses y por valor de 4 millones de euros, que correrá a cargo de las arcas del Estado, se encuentra todavía en fase preparatoria. Intentando sentar las bases que soportarían los grandes pórticos de hormigón responsables del peso de una prolongación destinada a despejar atascos en una de las entradas principales del barrio. Los técnicos indican que los operadores ejecutarán las mamparas de la carcasa de empuje que luego se vaciarán para seguir construyendo los marcos de hormigón que componen el paso inferior. Todo este proceso llevará unos meses, por lo que es posible que el proceso de la unidad de cuadro no comience hasta octubre. Según fuentes cercanas al proyecto, este retraso tiene que ver con las restricciones higiénicas que impone la pandemia. La dificultad para mantener una actividad continua durante el parto provocó un retraso acumulativo de varias semanas. Aun así, los responsables confían en que el tiempo de entrega se ajustará en la medida de lo posible a la fecha fijada.
Los habitantes de Ciudad Naranco son los más afectados por la ralentización del trabajo. Desde el inicio de las obras se han intensificado las habituales caravanas con coches que entran en esta zona e incluso se realizan en días festivos. «A pesar de que la actividad con el coronavirus ha caído drásticamente, hay muchas personas que pierden muchos minutos todos los días en horas pico», explica el vecino Javier Alonso, que se define como «una víctima más» de un trabajo muy esperado. Confiamos en que los inconvenientes del presente serán la solución del futuro ”, agregó este vecino.
Queda por ver si la fase de montaje final de la nueva mudanza se agilizará y cumplirá con las expectativas del alcalde de Oviedo, que el 14 de octubre del año pasado confiaba en que las obras patrocinadas por el gobierno central se completarían en un año. con la principal queja de los vecinos de uno de los barrios más poblados y animados de la capital asturiana.
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