El PSOE presentó este martes una denuncia por cohecho en Murcia contra el presidente regional Fernando López Miras y los exdiputados de Ciudadanos Isabel Franco, Antonio Sánchez, María del Valle Miguélez y Francisco Álvarez, que se opusieron a la moción de censura patrocinada por Ciudadanos junto a los socialistas que estaban posteriormente designados concejales.
Así lo anunció el secretario de Organización del PSOE y el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, durante un debate con el Partido Popular en la reunión de control de gobierno en el Senado. En concreto, Ábalos ha acusado al PP de haber «comprado» traidores en Murcia y ha anunciado esta denuncia de cohecho.
EL TRANSFUGISMO EN MURCIA «TRASCENDE EL PLANO POLÍTICO»
En la denuncia a la que tuvo acceso Europa Press, el PSOE defiende que en el caso Murcia, más allá de la «carga social» por el «acto de transfuguismo», se añaden otros elementos que trascienden el plano político, dando lugar a que se pueda vislumbrar ese comportamiento. como hechos con relevancia criminal ”.
En concreto, el PSOE advierte de que «hay un elemento más allá de lo político» que convierte en «criminal» la conducta del presidente murciano y de los exdiputados de Cs y que los exdiputados recibieron «a cambio» de su voto lo contrario en la solicitud «un recompensa por su comportamiento «después de firmar que apoyarían la solicitud.
Una consideración que, según el PSOE, «sin duda ha pasado a primer plano en los nombramientos de consejeros que no ostentaban hasta que comprometían su voto». Ese era «el significado del trato», defienden.
«LA VOTACIÓN ESTÁ APOYADA POR UN PAGO»
En este sentido, afirman que en este caso «el voto está sujeto a pago, represalia, recompensa o obsequio», lo que implica que es «un hecho típico que perfecciona la conducta perseguida en el artículo 421 del Código Penal». Y luego cobran los sueldos que ahora están recibiendo los nuevos miembros del Gobierno murciano como prueba de esta consideración.
En su denuncia, los socialistas abordan el hecho de que la decisión de los exdiputados Ciudadanos de romper la disciplina electoral «no se basó en una decisión política» sino que «se basó en una compensación a cambio de ella».
El PSOE apoya sus argumentos y contribuye, entre otras cosas, a las alegaciones que la persona que quiso asumir la presidencia de Murcia hizo en Twitter con la solicitud. La líder de los ciudadanos de esta comarca, Aina Martínez Vidal, denuncia que el PP intentó comprar «naranjas» a los diputados.
Según el PSOE, la decisión de López Miras de nombrar a estos diputados ciudadanos revoltosos como nuevos miembros de su gobierno “a cambio de un voto escapa a la discreción del presidente y se convierte en un hecho típico, ilegal y culpable. porque ya no forma parte de su libertad ni de su negociación política ”.
«Se convierte en una herramienta para comprar testamentos que podrían constituir un delito de cohecho en competencia con un delito de prevención administrativa», dice la denuncia.
Teniendo esto en cuenta, insisten en que la conducta del presidente murciano y exdiputados de Ciudadanos “protege los bienes jurídicos protegidos por el soborno, el prestigio y reputación de la administración pública, la imparcialidad en su funcionamiento y la eficacia de este servicio. público «.
Por todo ello, defienden que este comportamiento «encaja perfectamente con los elementos del tipo de cohecho pasivo inherente al artículo 421 del Código Penal y también con el» cohecho pasivo indebido «contenido en el artículo 420.
“La clave de la conducta descrita es la relación o relación causal entre aceptar el puesto, mantenerlo u ofrecerlo y llegar a alcanzarlo, y todo ello a cambio de su voto”, enfatizan.
También denuncian la supremacía administrativa contenida en el artículo 404 del Código Penal, “pues se restringe la libertad del presidente para nombrar a sus directores si la causa no es solo el resultado de una promesa o consideración injusta, sino que los nombramientos en sí son ilícitos y arbitrarios por obedecer propósitos equivocados ”.
EL PSOE HABÍA CRITICADO LA QUEJA DE PODEMOS POR LO MISMO
El PSOE toma esta decisión en Murcia tras la denuncia interpuesta hace unas semanas por su socio de gobierno Unidos Podemos, que interpuso esta denuncia ante la fiscalía anticorrupción contra el secretario general del PP, Teodoro García Egea y el exsenador de Cs. Fernando Hervías, junto a López Miras y los tres exdiputados de Educación de Inés Arrimadas.
Desde el primer momento los socialistas tildaron de «transfuguismo» al movimiento del PP ya los exdiputados de la ciudadanía murciana, aunque nunca hablaron de emprender acciones legales.
Tras el anuncio de United We Can de que llevaría esta denuncia a la fiscalía anticorrupción, algunos miembros del poder ejecutivo del ala socialista se distanciaron de la decisión de su socio de gobierno.
Este fue el caso, por ejemplo, de la vicepresidenta primera Carmen Calvo, quien separó al gobierno de la decisión del entonces vicepresidente segundo Pablo Iglesias. «Esa decisión la tomó Iglesias como presidente del partido, no como segundo vicepresidente», dijo Calvo en ese momento.
La secretaria de Defensa, Margarita Robles, por su parte, criticó la decisión de United We Can, afirmando que «la vida política no debe ser procesada».
Comments