El consejero pide ‘responsabilidad y cordura’ para la Pascua mientras ‘continúa la pandemia’
El ministro de Sanidad y Familia, Jesús Aguirre, ha asegurado este lunes que la junta ha pedido que las empresas puedan decidir «voluntariamente» sobre el uso de mascarillas en sus instalaciones una vez se produzca el decreto del Gobierno central de levantamiento de su obligación en el interior.
Así respondió Aguirre a las preguntas de los periodistas durante la colocación de la primera piedra del centro de salud Don Manuel Leiva en Palos de la Frontera (Huelva), donde insistió en que aunque el Gobierno central publicará la semana que viene el decreto por el que se usarán mascarillas Se levantará la obligatoriedad de los interiores”, exigió la junta que se mantenga su uso en los centros de salud y el transporte público y que las empresas decidan voluntariamente sobre su uso.
Asimismo, el consejero ha pedido «responsabilidad y sentido común, ya que «aunque se espera una Semana Santa tranquila, la pandemia continúa», ya que ha recordado que «en Andalucía hay 460 hospitalizaciones, pacientes en cuidados intensivos, gente fallecida por la Covid-19». e incluso un aumento de la gripe A«.
“Nuestra recomendación es el uso de mascarillas en las aglomeraciones que asisten a las procesiones y cuando no se pueda mantener la distancia de seguridad, además de utilizarlas en los tramos que hemos acordado con las cofradías para intentar minimizar el número de contagios a provocar. », subrayó la consultora.
Por otro lado, la ministra de Sanidad ha destacado que en la próxima reunión del Consejo Interterritorial, que tendrá lugar el próximo miércoles 20 de abril, «poco se puede decir» ya que la ministra de Sanidad presentará el decreto a la Consejo de Ministros sobre la supresión de la obligación de llevar mascarillas «y se espera que se publique el mismo día en que tendrá lugar la reunión».
Sin embargo, Aguirre ha señalado que en la reunión el ministerio “volverá a solicitar la autorización del ministerio para administrar una nueva dosis en la zona de mayor incidencia, es decir, las personas mayores de 80 años, ya que hace seis meses que no hay dosis”. desde el tercero «se administra y cae la inmunidad, además de que hay un gran stock de vacunas».
“Como no podemos discutir el uso de mascarillas, esperamos que nos den este permiso administrativo para vacunar a aquellas personas de zonas periféricas que tienen mayor incidencia acumulada y nos pueden dar más problemas de ingresos hospitalarios”, concluyó Aguirre.
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